El próximo jueves, 30 de diciembre, se clausurará la exposición “Melquíades Álvarez: Retratos y otras figuras en el espacio”. Muestra monográfica que ha reunido más de medio centenar de obras: dibujos, pinturas y una escultura, procedentes de la colección del propio autor y de colecciones particulares.

Estas obras son resultado en su mayor parte de los últimos tres años de trabajo del artista, aunque con algunas incorporaciones de obras anteriores: retratos de gente cercana en afectos y fisionomías y otras figuras haciendo cosas o en reposo; todas detenidas en el tiempo.

Es la primera exhibición que Melquíades Álvarez (Gijón, 1956) dedica a la figura humana, fruto de la búsqueda de una vía de expresión distinta a la de sus paisajes y de la ganancia de una nueva curiosidad en la observación de sus semejantes. En las escenas hay algo de realismo mágico, según el término acuñado por Franz Roh en 1925, del surrealismo de René Magritte o de la soledad de los motivos de Edward Hopper, sin olvidarnos de la esencia de sus propios Caminos (Trea, 2010), que ya expusiera en el museo hace más de una década.

En palabras del propio Melquíades Álvarez: las escenas son encuentros, revelaciones poéticas fugaces que se fijan y se trabajan encontrando a cada paso esa riqueza de significados que la realidad tiene cuando se la escucha. Escuchando, observando, me he vuelto parsimonioso y detallista, y en esa demora tan aparte de estos tiempos de simplicidad presurosa […] acepto la posible crítica al anacronismo de mi trabajo. […] Pero […] lo que he pintado lo he visto y sentido de primera mano, existe y, de alguna manera, es siempre nuevo e inagotable, y el impulso de pintarlo no es sino la salud misma y el latido de la pintura que se propaga desde sus inicios a través de los maestros de los que se aprende pero a los que no se copia.

Horario de visitas: de martes a viernes, de 10.00 a 13.00 h; sábados y domingos, de 12.00 a 14.00 h; el museo permancerá cerrado los días 31 de diciembre, 1 y 6 de enero, así como los lunes.